Debido a la cantidad de máquinas, herramientas y procesos que dependen del aire comprimido en las industrias, una parada de un compresor por avería supondría elevadas pérdidas económicas a causa de la inactividad. Para evitar esto es obligatorio realizar un correcto mantenimiento preventivo de los compresores.
Un adecuado mantenimiento también evitará los gastos derivados de reparaciones de emergencia y aumentará el tiempo de vida útil del equipo y la eficiencia del compresor.
Algunos de los componentes que hay que revisar y sustituir, al menos una vez al año, y algunas de las tareas que hay que realizar en el mantenimiento preventivo del compresor son:
- Cambiar el aceite.
El aceite es imprescindible para lubricar y refrigerar varios componentes del compresor, y con el tiempo se va degradando y perdiendo propiedades, por lo que es necesaria su sustitución. - Cambiar los filtros de aceite.
- Cambiar los filtros de aire.
Los filtros de aire se obstruyen a causa de las partículas presentes en el aire, reduciendo el rendimiento del compresor y provocando mayor consumo de energía para realizar funciones básicas. - Cambiar el separador aire-aceite.
El aceite puede filtrarse en el aire si el separador de aceite deja de funcionar correctamente y eso puede tener efectos devastadores. - Cambiar las correas.
- Comprobar los consumos eléctricos de los equipos.
- Revisar y limpiar las válvulas de control y las rejillas de ventilación.
- Controlar la presión.
- Realizar un control de temperatura.
- Reacondicionar el tornillo y el motor eléctrico entre las 30.000 y 40.000 horas de funcionamiento del compresor.