Las enfriadoras de agua se utilizan principalmente para refrigerar procesos industriales (inyectoras, moldes, intercambiadores, procesos alimenticios, soldadoras…), para ello utilizan el agua como elemento enfriador a través de un circuito cerrado.

La ventaja de las enfriadoras es que pueden mantener la temperatura del proceso fija durante todo el año, alcanzando temperaturas por debajo de la temperatura ambiente (<20ºC).

Las enfriadoras de agua funcionan de manera similar a un equipo de climatización convencional.

Un circuito cerrado de gas refrigerante, compuesto por un evaporador, un compresor, un condensador y una válvula de expansión, se encarga de enfriar por trasmisión térmica, el circuito cerrado de agua. Y este circuito de agua enfría de manera directa el proceso industrial.

El proceso de enfriamiento se produce en la zona del evaporador, ya que la tubería del circuito de agua está muy cerca del mismo, y por transferencia térmica, la tubería disipa su calor y por tanto disminuye la temperatura (enfría) del agua de su interior.

En el caso de procesos industriales alimenticios (limpieza de alimentos, cubitos de hielo…) no está permitido que el agua de la enfriadora entre en contacto con el alimento, por lo que es necesario el uso de un intercambiador de calor y un segundo circuito de agua, que puede ser abierto o cerrado.

Por lo que estaríamos hablando de tres circuitos: